Esta es una historia real, un drama que nos cuenta cómo un hombre cumple su 
condena en uno de los lugares más desesperantes, alejado completamente de la 
aplicación de la ley y en un ambiente hostil que se rige por sus propias reglas: la 
cárcel.  Un lugar donde no existen los derechos humanos; por el contrario, este 
lugar es conocido por un sinnúmero de actos de crueldad.
Recorramos junto con el autor estas reflexiones de vida, en donde cuenta, con 
sus propias experiencias, cómo en el presidio los responsables de un sistema de 
justicia son los mismos que ejecutan los actos más atroces y de una forma por 
demás arbitraria. Un fuerte y desgarrador testimonio que cuestiona la efectividad 
de las prisiones, pues con esta realidad, difícilmente podrán ofrecer una 
readaptación de los presos en la sociedad.